Los celulares

Los celulares
Miércoles, 15 de Agosto de 2012 00:18
Escrito por Jorge Luis González Suárez

Cuba Actualidad, Plaza, La Habana. Un celular es un telefonito compuesto
por células electrónicas. Su misión es comunicar, aunque sirve casi para
todo. Viaja con uno y se utiliza donde quiera.

Desde que la Ericksson inventó el inalámbrico, el cable está de más.
Graham Bell y Meucci se quedarían hoy con la boca abierta: estamos en la
era de la ciencia sin ficción.

Ya los cubanos podemos adquirir los celulares sin restricciones. Todo
depende de que usted tenga divisa para gastar y botar. Poseer el
aparatico lo convierte en señor aristocrático, aunque esté con una mano
"alante" y la otra atrás. Dárselas de potentado es un lujo. Su imagen va
a crecer. Cuando lo saque en público, todo el mundo se fijará en usted.

Los tipos y marcas dan su posición económica. No es lo mismo un Alcatel
que un Samsung. Si exhibe un Motorola, llegó a buena altura. Antes un
televisor de esta firma era de quinta categoría, ahora un celular es lo
máximo.

Las susodichas maquinitas empezaron por las teclas, ya vamos por los
táctiles. En cualquier momento son los que van a dar órdenes a las personas.

Los precios se han reducido. Puede comprar un celular hasta por $37.00
cuc. No salen muy buenos pero lo tiene. El asunto no para aquí. La
situación es mantener la línea y comprar las tarjetas. Los gastos son
fabulosos. El minuto está a 45 centavos. Piense primero que va a decir y
después llame. Los que hablan hasta por los codos deben ser millonarios.
También pueden ser gente como mucha FE (familiares en el exterior). Son
a los que les cuesta la cosa.

El celular sirve además para otras cosas. Tienen agenda telefónica y de
direcciones. Se añaden la música, la cámara fotográfica y los juegos.
Usted puede comprobar como sus propietarios pasan y pierden el tiempo
con ellos. Son espectáculos públicos inigualables. Si usted tiene
tiempo, siéntese y mire, me dará la razón.

Hay una modalidad de comunicar sin gastar. Compruebe en la pizarra quien
lo llama, cuelgue y llame después desde su casa. Esta versión casi
seguro es puramente cubana. El ahorro es muy eficaz. La defensa es
permitida. Otros cuentan los segundos. Esta variante da nuevas
posibilidades. La respuesta al llamado es: "te llamo enseguida". El
único habitante del planeta terrestre que suena el celular y corre al
aparato público es el cubano.

Los "aseres" son los que dan imagen de mayor ostentación. Reciben toda
llamada si es en público. Cuando nadie los ve, no responden. Aparentan
hablar. La realidad es que establecen un monólogo. El teléfono es un
objeto de lujo. El uso está previsto para demostrar que ellos si son
magnates. ¿Cómo resuelven su pago? Normal, gracias al "invento". Su vida
es un arte de magia, en el mejor de los casos.

La última palabra es el twitter. Cada mensaje le cuesta un "fula". Aquí
sí hay. Esta palabrita me recuerda al muñequito Twitty. Es lo más
parecido que yo conozco. Tendrán que enseñarme que es eso. Como decimos
por acá: "estoy botao". Quiero pero no puedo. Tengo en eso una buena
cantidad de seguidores.

No estoy en contra del desarrollo, pero hace falta que sea asequible.
Cada vez que veo algo nuevo, me quedo en el aire. Mis recursos no llegan
a tanto. Me siento como un indio que vive en Las Vegas. Trato pero no
alcanzo a comprender. Espero tener alguna posibilidad. Me consuelo y
digo: "ya lo tendré"

Cada día que pasa estoy más apartado del universo. La telefonía digital
apareció. El que está desaparecido de ella es "mangui". Voy a cantar una
versión de una canción guajira; "Cuando llegaré, Cuando llegaré"....al
celular.

Dedicada a: Luis Echegoyen y su singular personaje, Mamacusa Alambrito.

Para Cuba actualidad: jorgelibrero2012@gmail.com

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