El disidente cubano sale del hospital donde pasó buena parte de su
huelga de hambre por la liberación de los presos políticos
EFE - Santa Clara - 30/07/2010
El disidente cubano Guillermo Fariñas, que pasó más de cuatro meses en
huelga de hambre para pedir la libertad de los presos políticos en la
isla, ha regresado a su casa tras recibir el alta en el hospital donde
transcurrió la mayor parte de su ayuno, que abandonó el pasado 8 de
julio después que el régimen anunciara la liberación de 52 reos.
"Me siento extraño en casa, adaptándome, abrazado con mi hija, mi
hermana, esperando a mi sobrina que considero como a mi hija adoptiva",
declaró desde su residencia en la ciudad de Santa Clara, unos 300
kilómetros al este de La Habana. El periodista, de 47 años, asegura que
su plan es "comenzar a escribir artículos de nuevo en cuanto pueda".
Según explicó, los médicos decidieron darle el alta porque sus índices
de coagulación han mejorado, pero a partir de ahora su caso tendrá que
ser seguido por un especialista cada 15 días. En las próximas semanas
tendrá que utilizar una silla de ruedas hasta que los médicos decidan
dar el visto bueno para que comience el trabajo de fisioterapia y poder
caminar.
El pasado 24 de febrero Fariñas inició una huelga de hambre y sed en
homenaje al preso fallecido Orlando Zapata que duró 134 días, y que
concluyó el 8 de julio después de que la Iglesia católica anunciara el
compromiso del Gobierno cubano de liberar a 52 disidentes del Grupo de
los 75, condenados en 2003. Veinte de ellos ya han sido excarcelados y
han sido trasladados a España, hecho que el periodista considera una
victoria, tanto para el Gobierno cubano, "porque han aprendido a ser
flexibles con sus opositores", como para la disidencia, porque ha
aprendido que "con perseverancia, dignidad y no violencia se pueden
lograr objetivos". No obstante, dice no sentirse plenamente satisfecho
de cómo se ha producido el proceso por el traslado directo de los
opositores desde la cárcel hasta el avión en el que viajaron con sus
familias hasta Madrid.
Fariñas reitera que no ha abandonado su protesta, sino que la "ha
pospuesto", y asegura que analizará la posibilidad de reanudarla si el
Gobierno de Raúl Castro no cumple con su compromiso en el plazo máximo
de cuatro meses dado para liberar a los 52 reos del Grupo de los 75 que
quedan en la cárcel. También opina que si el régimen libera a todos los
presos políticos, la disidencia cubana "debe entrar en otra etapa, que
es sentarse a valorar que nos une y que nos separa. Y trabajar en lo que
nos une y dejar lo que nos separa para cuando haya democracia en Cuba".
Para el disidente, Cuba vive una "coyuntura histórica importante",
aunque "no debemos confiarnos. No debemos acomodarnos. Debemos seguir
empujando otras puertas", concluye.
No hay comentarios:
Publicar un comentario