Julio Andrés Borges
Martes, 6 de julio de 2010
El 5 de julio es una fecha patria muy importante porque significa la
firma del acta simbólica de independencia de nuestra Venezuela. Sin
embargo, actualmente vivimos algo insólito: la invasión cubana. Es
demostrado que funcionarios cubanos o llamados asesores, se han venido
posicionando en los sectores más importantes como la administración de
puertos, el manejo de las telecomunicaciones, petróleo y energía, sector
eléctrico, inmigración, la policía y para mayor indignación de todos los
venezolanos, en la Fuerza Armada.
Es por ello que me planteo: ¿un soldado venezolano tiene que acatar el
mando de alguien de otro país? ello es traición a la patria. Es violar
nuestras leyes, así como han venido comprometiendo nuestra seguridad y
soberanía. Estos funcionarios de Cuba hacen negocios en el país por
sobre los 20 millones de dólares. En el mes de diciembre se les entregó
por convenio, un monto de 3,5 millones de dólares para que nos
asesoraran por la crisis eléctrica que se vive en Venezuela.
Después se le entregó 2,4 millones de dólares a Cuba para servir de
intermediario en la importación de alimentos, haciéndose una
triangulación, en la que los cubanos compran los alimentos a otros
países y luego nos los venden para que los venezolanos paguemos una
comisión. Esto es totalmente irregular. Por otro lado, tenemos
entrenadores deportivos cubanos. Me pregunto: ¿será que los entrenadores
deportivos venezolanos no tienen la misma capacidad?. Por supuesto que
sí, están capacitados y vamos a tener una representación de ellos este
26 de septiembre. Sobre la Misión Barrio Adentro, considero que debe
continuar, pero sus ambulatorios deben ser atendidos en 100% por médicos
venezolanos, pues tenemos profesionales perfectamente capacitados para
ocupar esos puestos.
Igualmente hay que revertir los negocios cubanos con nuestro petróleo.
La medicina y el deporte venezolanos superan a los de Cuba, por lo que
tiene que haber un despertar. No se trata sólo de la regaladera de
dinero a Cuba, sino de la invasión, la intimidación. En fin, el miedo
que nos quieren infundir. Pero el temor ya empezó a morir, por ello
estamos dando la cara, para llevar el mensaje de la democracia. Este 26
de septiembre tenemos la oportunidad para ser independientes. Que sean
los venezolanos quienes trabajen en las notarías, que manejen el
petróleo, la electricidad, los puertos, así como los servicios de
identificación, entre otros.
No dejaremos que nos intimiden. La Justicia es para defender la
soberanía de la patria y para lograr ser de nuevo independientes.
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