La lenta muerte del teatro Campoamor
El hermoso teatro habanero, símbolo de las decadas del 30 y 40, que 
tanta música y alegría, dio a los cubanos, está sentenciado
miércoles, julio 30, 2014 | Reinaldo Emilio Cosano Alén
LA HABANA, Cuba. — El Capitolio, Monumento Nacional, sede del Congreso 
de la República hasta 1958, está en reparación, más modesto, a solo unos 
pasos, el Teatro Campoamor, está condenado a muerte. Una larga muerte de 
medio siglo.
¿Qué significó este hermoso teatro en forma de herradura, artesonado con 
orlas doradas, y palcos con barandillas de bronce, donde se daba cita la 
sociedad habanera y el populacho se apelotonaba en el gallinero para 
chiflar al tenor de opereta, al que se le hubiera escapado "un gallo".
En el Campoamor brillaron Rita Montaner, "La Única", Libertad Lamarque, 
Imperio Argentina, Lola Flores ¡taconeandoy exhaltando españolísima ¡Que 
viva el Campoamor¡
En teatro de moda en La Habana de los 30 y 40, Don Fernando Ortíz 
celebró sus veladas afrocubanas, donde, por primera vez, se escucharon 
en un escenario los tambores batá de Pablo Roche en 1936. Ese mismo año 
Ortiz auspició, en el Campoamor, el Festival de Poesía que dirigió Juan 
Ramón Jiménez.
Por la escena del Campoamor pasaron las grandes compañías de vodevil 
españolas y cubanas con las vedetes Angelita Castany, Blanquita Amaro, y 
lo más chispeante del teatro vernáculo. En zainetes con música de 
Rodrigo Prats, los inolvidables Alicia Rico y el viejito Brienguer, con 
chispa contagiosa, improvisaban morcillas, atacando a los políticos de 
la época.
Veamos este anuncio que encontré en una revista Lux de la época: 
"Cine-velada 15 de agosto en Campoamor: 1. "Más gatitos" (cartón de 
Artistas Unidos); 2. Noticiero (Universal); 3, Noches de Fuego 
(International Films). 1938". En su pantalla, Campoamor mostró en un 
noticiero al Presidente Roosevelt dirigirse a las naciones civilizadas 
para que proscribieran la barbarie bélica que se aproximaba. Mensaje 
escuchado por cincuenta millones de personas a través de mil trescientas 
estaciones de radio del mundo.
Campoamor proyectó en 1954, el filme Hamlet, lo más logrado de la 
cinematografía inglesa y Roma, cittá aperta, excelente realización del 
neorrealismo italiano. También innumerables películas mexicanas y 
melodramas argentinos incluidos las del ídolo del tango Carlos Gardel.
El Campoamor combinaba los sainetes bufos con compañías de vodevil y 
películas. Exhibía dos largos metrajes en cada función, uno o dos cortos 
noticiosos y cortos de humor. Era costumbre que un espectáculo 
dramático-musical, por lo general piezas picarescas con doble sentido o 
alusiones políticas se mantuvieron por largo tiempo en escena. Por 
exigencia del gremio de músicos y artistas, el gobierno obligaba a los 
dueños de salas teatros, a ofrecer películas conjuntamente con 
espectáculosen vivo.
El afamado criminalista argentino Osvaldo Laudet en una conferencia en 
el Teatro Campoamor, expresó: "¡Vivir es una cosa diferente a existir!" 
Sentencia aplicable al Teatro Campoamor porque entre vigas, techos y 
paredes en ruinas, existen piedras aun vivas que cuentan historias 
secretas de amor, pasiones, recuerdos, nostalgias, penas, suspiros, 
risas, llanto, esperanzas.
En el filme Arte nuevo de hacer ruinas, del alemán Florian Borchmeyer, 
basado en la crónica del escritor Antonio José Ponte, la cámara entra a 
las ruinas del Campoamor, donde en lo que fuera el artesonado escenario 
vivió, Reinaldo, trabajador del teatro por ocho años, y que, sin casa, 
como tantos cubanos, vivió entre las ruinas. El amor de Reinaldo por las 
memorables piedras, en el filme de Borchmeyer, aprieta las gargantas. 
Reinaldo falleció en un derrumbe, cuando la pared del fondo del 
escenario, se desplomó en el 2012.
El Teatro Campoamor, en el entorno de La Habana Vieja – Patrimonio de la 
Humanidad– por su historia y arquitectura, es un inmueble patrimonial.
La mandarria de la revolución también lo convertirá en polvo.
cosanoalen@yahoo.com
Source: La lenta muerte del teatro Campoamor | Cubanet - 
http://www.cubanet.org/destacados/la-triste-muerte-del-teatro-campoamor/
 
 
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