28 de febrero de 2014

Basta engaños!

"¡Basta engaños!"
[27-02-2014]
Héctor Maseda y Roberto Díaz Vázquez
Grupo Decoro

(www.miscelaneasdecuba.net).- El gobierno cubano trata de ampliar su
presencia e influencia en América Latina, no esconde sus intenciones de
mejorar las relaciones con los Estados Unidos de Norteamérica para que,
en un futuro próximo, el embargo decretado contra Cuba y respetado por
los sucesivos gobiernos de ese hermano país, cese definitivamente; y de
paso aprovecha la iniciativa emprendida por la Unión Europea (UE) para
normalizar sus relaciones con la Isla; sin que por ello se produzcan en
Cuba -como sí lo exige el resto del mundo- cambios profundos hacia el
respeto a las libertades ciudadanas y, en consecuencia, nuestro país se
abra hacia la democracia y la futura creación de un Estado de Derecho.
Las actuales maniobras de Raúl Castro y sus asesores se fundamentan en
un proceso de cambios que ha denominado "Plan para la actualización del
socialismo", apoyado en las inversiones extranjeras procedentes de
países del continente y de otras latitudes del planeta y, en la
integración diplomática y comercial de Cuba validada por varios
gobernantes de izquierda de naciones de esta región.

No es menos cierto que, en ese sentido, ha obtenido éxitos en diferentes
direcciones, como son:
a) convertirse en garante de las conversaciones que tienen lugar en La
Habana, Cuba, para alcanzar el esperado y definitivo acuerdo de paz en
Colombia, entre el gobierno de ese país y las FARC;

b) lograr que fuese propuesto y se aceptara Cuba como miembro, primero;
y nombrar en calidad de Coordinador "pro Tempori" después, de la II
Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC),
celebrada en la capital cubana entre los días 28 y 29 de enero/2014; a
Raúl Castro Ruz, el Jefe de Estado que representa al único gobierno
totalitario en el continente y que contradice -con su presencia y
responsabilidad asignadas- los principios reflejados en la Carta
Fundacional de tan importante agrupación hemisférica defensora de la
integración continental de América Latina en múltiples direcciones:
económicas, políticas y sociales de interés común para sus miembros;

c) con el nuevo arribo al poder del PRI en México, el gobernante cubano
ha realizado varios "actos de magia" en el campo de "la diplomacia
negociadora", para restablecer las históricas buenas relaciones que
existieron entre Cuba y México y que se fragmentaron durante la
realización de la Cumbre de las Américas (el Presidente de ese país era
Vicente Fox, anfitrión del evento que, en esa oportunidad, sostuvo una
discusión con Fidel Castro), celebrada en la ciudad de Monterrey,
México, en el año 2002; y por último

d) El multimillonario apoyo financiero recibido por el gobernante cubano
de la Jefa de Estado de Brasil, Dilma Rousseff, para llevar a la
realidad el ambicioso proyecto cubano-brasileño y otros intereses
foráneos en la Zona Especial de Desarrollo del Mariel (ZEDM), inversión
que, por el momento, supera los mil millones de dólares estadounidenses.

Lo anteriormente expuesto forma parte de la verdad, pero no la
constituyen en toda su extensión y profundidad. Veamos ahora la otra
cara de la moneda. Para su fundamentación, expondremos algunas de las
ideas que hizo públicas el Centro de Apoyo para la Transición en Cuba
(CAT) al cual pertenezco y desde cuyas filas luchamos para instaurar una
Cuba futura superior a la actual en todos los órdenes de interés para el
cubano medio.

En primer lugar, Cuba no presenta signos visibles de cambio alguno, sólo
reformas dentro del mismo modelo disfuncional. Una prueba de ello la
observamos en sus propias modificaciones para "lograr mejoras" en la
función económica al permitir la participación masiva de cubanos en
proyectos inversionistas en el territorio nacional a nivel de micro
empresas privadas (mep) lo cual provocó que de cien mil mep que existían
en el año 2010 ascendieron a más de cuatro ciento cincuenta mil en el 2013.

Pero cuando los funcionarios del Estado responsabilizados en su control
se percataron de su crecimiento acelerado, su eficiencia, ganancias,
productividad,… aplicaron restricciones en los mismos (multas, cierre de
microempresas, rescindiendo licencias previamente otorgadas,…) en franca
demostración de su miedo a la elevada competencia de los
micro-empresarios privados en precios, calidad y diversidad de sus
ofertas, inalcanzable para el sector estatal equivalente, a pesar de
disponer de los recursos financieros y medios técnicos que carecen los mep.

Sumemos a esta realidad económica, estrangulada y arbitraria al no ser
respetada la Ley del Valor por parte del gobierno cubano; su sistemática
violación a las libertades en la gestión económica y la negación real
por parte del Estado que impide el desarrollo sostenible de su población
afectando al cubano medio, tanto económica como social y
medioambientalmente.

Lo cierto es que la economía cubana está en crisis total debido, en gran
medida, a su centralización absoluta que aplicada por más de medio
siglo, ha dado lugar a un efecto involutivo perpetuo. Esta realidad no
solamente deprime las finanzas de la familia criolla, sino también al
medio ambiente por no existir la mínima posibilidad económica y
proyectos que eviten la contaminación ambiental para la implementación
de soluciones reales a corto y mediano plazo; situación que traerá como
resultado la inevitable caída en picada de la economía en el país. Lo
cierto es que estas realidades nos señalan cuál será el verdadero y
pésimo derrotero que, indefectiblemente, nos llevarán a la
desaceleración económica de Cuba, cuyos únicos culpables serán, por su
ineptitud, quienes gobiernan la Isla actualmente.

Otro elemento a tener en cuenta y que conspira para lograr un armónico y
acelerado desarrollo económico en la Isla, gracias al esfuerzo de todos
los cubanos, es el control absoluto de los medios de difusión masiva en
manos del Estado totalitario y su manipulación y malos ejemplos del
grupo gobernante, realidad que alimenta y promueve algunos de los
factores que imposibilitan a la ciudadanía ver una intención real de
cambios positivos por parte de los que nos desgobiernan.

No podemos olvidar que Cuba es firmante de la Declaración Universal de
los Derechos Humanos que no respeta de principio a fin. Es firmante de
los Pactos de los Derechos Políticos y Civiles, Sociales, Culturales y
Educacionales, pero no los ha ratificado, situación ésta que lo exime de
su obligatorio cumplimiento.

También debemos considerar que la UE actualmente maniobra y emplea todos
sus recursos diplomáticos y políticos –en primera instancia- y por
último también lo hará con los económicos, para normalizar sus
relaciones con el gobierno cubano, al parecer preocupada por las
perspectivas comerciales que presenta la Zona Especial de Desarrollo del
Mariel (ZEDM) y las macro-inversiones que tienen lugar en esa área y las
perspectivas económicas que estas inversiones (basadas en capitales
invertidos por Brasil y otros países asiáticos y Rusia, entre otros)
representarán para los que participen en la repartición de ganancias
futuras.

Es obvio que la UE no desea quedarse al margen de las posibilidades
financieras que puede recoger de esas mega-inversiones y sus ulteriores
dividendos si participa en el mismo o, por el contrario, las pérdidas
que le podría representar si se mantiene al margen en estos movimientos
financieros.

Otro de los puntos de inflexión insalvables para Washington -Ejecutivo y
Congreso- para proceder a la suspensión del "Embargo Económico" a Cuba,
se fundamenta en que deben producirse en la Isla cambios profundos
socio-políticos y económicos a corto plazo, realidad que, hasta el
momento, no se ha materializado, al no recogerse las señales requeridas
que deben implementar las autoridades cubanas.

¿Y qué podemos decir del descubrimiento de armas ocultas procedentes de
Cuba y no declaradas, en las bodegas de un barco bajo bandera de Corea
del Norte cuando su tripulación pretendía pasar con la nave y su bélica
carga al Océano Pacífico con destino al país asiático a través del Canal
de Panamá?

Otros de los elementos negativos que golpean las pretensiones del
gobierno cubano de mejorar sus relaciones hemisféricas a nivel de
gobierno (aunque se le reste valor por muchos dignatarios
latinoamericanos y caribeños y de los propios Estados Unidos de
Norteamérica) lo constituyen tanto la condena en Cuba a 15 años de
prisión del contratista norteamericano Alan Gross, como los espías que
operaron durante años en territorio de los EE.UU. a favor de los
servicios de la inteligencia cubana y que extinguen largas condenas en
penitenciarías estadounidenses.

Varios especialistas foráneos y los nuestros del Centro de Apoyo para la
Transición en Cuba (CAT), consideran que, por todas las razones
anteriormente enumeradas, NO se avizoran cambios apreciables que actúen
a favor de la credibilidad de las autoridades cubanas por parte de Jefes
de Estado y Gobierno en el continente y mucho menos en los círculos de
poder gubernamental de los Estados Unidos de Norteamérica, tanto en lo
económico y político como en lo social.

Con estas acotaciones incorporadas al texto por ser imprescindibles para
completar el análisis que exige este trabajo, aunque no constituyen las
únicas, sí poseemos todos los elementos necesarios y suficientes para
arribar a conclusiones objetivas acerca del tema que nos ocupa.

Source: "¡Basta engaños!" - Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/530f3e483a682e160020b0d2#.UxBdufldXg8

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