El gran salto
LUNES, 04 DE NOVIEMBRE DE 2013 00:13 ESCRITO POR PAULINO ALFONSO ESTÉVEZ
Cuba actualidad, Lawton, La Habana, (PD) Bueno, al fin ya el actual
presidente se pronunció sobre la doble moneda. Desde el 2006, cuando a
regañadientes, se hizo cargo de la administración de la finca en que su
hermano convirtió a Cuba hasta hoy, Raúl Castro ha hecho muy poco para
erradicar lo que él festinadamente llama "uno de los mayores problemas
de la economía": la doble moneda.
Para disertar sobre este fenómeno, paranormal como todo lo que pasa en
Castrolandia, se impone por desgracia un introito para que aquel que no
viva aquí, pueda sacar conclusiones de esto.
Veámoslo en su contexto histórico y actual.
La circulación paralela del peso cubano (CUP) y el peso convertible
(CUC) fue el paso emergente del por entonces Máximo Líder, que copiando
a los chinos lo estableció, para en medio de la catástrofe de los años
90, recaudar cual indigno jinetero, la plata que le volvía a entrar
desde el corral de los carneros (léase Miami), por lo que -usando el
metalenguaje castrista- se liberalizó el uso del dólar americano para la
población.
Junto con esta, se introdujo una tasa de cambio diferenciadas que
depreciaban -y aun lo hacen- el CUP para cubrir las operaciones con las
tan necesarias divisas.
Esto se mantuvo desde 1993 hasta 2004, cuando, casi por casualidad, fue
descubierto, el gatuperio del banco suizo UBS en las arcas del difunto
Saddam Hussein en Bagdad, lo que obligó al Líder Máximo a
institucionalizar el CUC como única divisa circulante en Castrolandia.
Esta movida, no obstante, le reportó cerca de US$1.2 billones en el
exterior por los dólares confiscados a tenor del cambiazo por un dinero
que solo vale en Castrolandia.
En el año 2007, durante la presentación de los lilimentos (digo)
lineamientos para actualizar el socialismo, el entonces poderoso
superministro Marino Murillo se refirió a la terminación a largo plazo
de la doble moneda. No así en el empobrecido sector empresarial y
presupuestado castrista, que tozudamente mantiene hasta la fecha, la
tasa de cambio del 1980 de 1x1 para registrar sus operaciones en una
disparatada contabilidad.
Hasta aquí la explicación necesaria.
Desde 2011 al 2013 se han tomado decisiones solo de carácter empresarial
que no obstante esbozan la gradual eliminación del CUC.
Este asunto del CUC /CUP se discute sotto voce desde hace 10 años,
primero entre los economistas, después entre los empresarios. La razón
por la que se mantiene no es otra que la inversión que tendría que hacer
el régimen para mantener el actual mercado en divisa, ya que cualquier
tasa inferior provocaría un estampida que limpiaría los anaqueles de
estos comercios.
Todos los economistas y contadores sabemos que el primer paso a dar para
esto es la apreciación del CUP en el sector empresarial para lograr la
necesaria reforma monetaria general. Mientras esta llegue, el debate
para llegar a esta será, por dos vías. La primera, la anteriormente
citada; la segunda, es la implementación de esta por sectores económicos
También puede hacerse intercalando estas medidas de acuerdo a su
conveniencia. De esto último ya se han hecho tímidos experimentos en
algunas empresas
Por último, y aquí sí hay problemas: ¿Qué tasa de cambio va utilizarse
hasta tanto se logre la moneda única?
Aparte de la histórica de 24 CUP X1CUC, en estos momentos se utilizan 4
tasas de cambio, a saber, para las operaciones petroleras con Venezuela,
4CUP: 1; para las ventas de productos agrícolas al turismo, 7CUP:1; y
10CUP: 1 para las compras de insumos de los privados a las tiendas
mayorista; y para registrar contablemente los ingresos en divisas del
gobierno, 12:1. Personalmente, me inclino ante la de 12:1, por ser esta
la que menos devaluaría el CUC.
Personalmente, no creo que esta tarea sea terminada por el actual
mandatario, quien le pasara el bastón al que por entonces sea
presidente. Esto será su gran salto.
Para Cuba actualidad: paulino.alfonso@gmail.com
Source: "El gran salto | Cuba noticias actualidad.Periodismo
independiente." -
http://www.primaveradigital.org/primavera/economia/51-economia/9040-el-gran-salto.html
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