Dónde está ahora el futuro presidente de Cuba?

¿Dónde está ahora el futuro presidente de Cuba?
MIÉRCOLES, 14 DE AGOSTO DE 2013 00:15
ESCRITO POR NILO JULIÁN GONZÁLEZ PREVAL

Cuba actualidad, Alamar, La Habana, (PD) Ya sabemos que los cantantes
son de la loma, donde también había cimarrones y guajiros, mambises y
españoles, y algún que otro traidor.

Ya sabemos dónde están Fidel Castro, su hermano y el nuevo delfín
Diaz-Canel. Sabemos también donde están el resto de los comandantes de
la revolución, los otros dirigentes históricos y la nueva casta de
militares, políticos de escuela y gerentes que intentarán sostener el
permanente estado de crisis social y económica en que se encuentra Cuba
y del cual ellos son los únicos beneficiarios.

Ya sabemos dónde está la familia cubana: Dividida y vencida fuera y
dentro de esta isla. Cansada de salir a luchar el pan de cada día y
esperando un milagro biológico o celestial. Esperando una llamada de la
familia desde el norte o un telegrama de la Western Union. Pero esperando.

Ya sabemos dónde están los activistas de la sociedad civil cubana. En
Miami, Madrid o Bruselas. Recibiendo premios, contribuciones
tecnológicas y monetarias. Ya sabemos lo que todos en su mayoría piden
Libertad de expresión. Libertad de asociación. Libertades económicas.
Libertades y libertades y más libertades, pero yo a veces tengo dudas.

Me pregunto: si entre Antonio Rodiles y Yoani Sánchez, pasando por las
Damas de Blanco, nadie pertenece a una plataforma política ni a un
partido específico, y todos pertenecemos a la sociedad civil, entonces
¿Diaz-Canel va a ser nuestro próximo presidente, o no?

Ese señor, al cual conozco solo por su escueta biografía publicada en
las redes sociales del mundo -en Cuba aún no hay redes sociales-, es el
único que está haciendo una campaña política. Y estemos de acuerdo con
él o no, cumple con algunos requisitos esenciales.

Aparece en los medios de difusión masiva del país diciendo algunas
verdades, verdades a medias, medias mentiras y mentiras completas, como
para darle múltiples opciones al que escuche el discurso sin fin de las
reformas económicas o migratorias en la isla. Tiene un partido político,
un Consejo de Ministros y una Asamblea Nacional que, como ha ocurrido en
los últimos treinta años de apoyo unánime a todas las leyes, reformas
constitucionales, proyectos sociales o educativos y campañas militares,
también lo apoya como posible sustituto y representa a uno o dos
millones de ciudadanos cubanos, más o menos, que aún creen que Cuba será
una potencia médica mundial y que tendremos una economía fuerte y llena
de productos para exportar.

Dominará y tendrá bajo su mando al Ejército, del cual será su comandante
en jefe y el cual le deberá obediencia según mandan las leyes de la
nación. Tendrá poderes de mando sobre la Policía Nacional Revolucionaria
y el resto de las fuerzas paramilitares de la nación, y por último,
tendrá acceso a las arcas del Estado, al Banco Central, es decir, será
el millonario más poderoso de Cuba. Entonces, ¿quién podrá evitar que él
sea nuestro próximo presidente?

Alguien debe de estar pensando lo que yo pienso o algo parecido. ¿Dónde
está ahora el futuro presidente de Cuba? ¿Podemos vivir en un país sin
presidente? Si hemos vivido en una dictadura durante cincuenta y cuatro
años, también pudiéramos vivir en un país sin presidente. El pueblo de
Cuba ha demostrado tener características muy especiales a la hora de
luchar por defender sus derechos.

El presidente de un país es la persona que da la cara a la nación. Es la
persona que dice las verdades o las mentiras, es quien encarna o debe
encarnar el poder social o civil. El presidente de un país debe ser la
persona que trace públicamente el camino de la nación.

En Cuba es evidente que esa persona debe ser un economista de entre 45 y
50 años. No imagino a un físico o un biólogo encargado de resolver los
graves problemas de una agricultura en crisis con un campesinado
desencantado de planes que nunca trajeron prosperidad. O de una
industria pesada que no produce trenes, ni ómnibus, ni aviones, ni
barcos, ni acero. Con una industria ligera incapaz en los últimos
treinta años de crear una Empresa Nacional de Fósforos, con fósforos que
no se peguen a las yemas de los dedos. Que sea buen mozo. De piel
quemada por el sol y con esposa e hijos visibles y públicos. Capaz de
nadar y de jugar a la pelota.

Debe tener sentido común y saber escuchar cuando otros le hablan
(escuchar es quizás el don más preciado que debe tener un presidente).
Escuchar también los rumores y los gritos, aunque no sean con él. Saber
escuchar significa también cumplir con esa norma fundamental de la
comunicación humana que es dejar hablar a los demás.

Un presidente debe saber sentarse en una esquina del barrio. Debe tener
su santo, su seña y su mano de Orula. Un presidente debe ser humano. Un
presidente debe ser sincero y un político sincero es algo inexplicable.
Existen, pero nunca llegan al poder, y cuando llegan son derrocados,
asesinados o se transforman de tal manera que uno termina preguntando:
¿dónde está ahora el presidente del país?

Para Cuba actualidad: nilojulian.@gmail.com

Source: "¿Dónde está ahora el futuro presidente de Cuba? | Cuba noticias
actualidad.Periodismo independiente." -
http://www.primaveradigital.org/primavera/destacados/117-politica/8311-idonde-esta-ahora-el-futuro-presidente-de-cuba-.html