Una sociedad corrompida

Una sociedad corrompida
Jueves, 06 de Junio de 2013 03:42
Escrito por Jorge Luis Vazquez Amaya

Cuba actualidad, Pedro Betancourt, Matanzas, (PD) En Cuba, el robo se ha
convertido en un medio para sobrevivir. Una crisis económica que se ha
extendido por más de 50 años, con sus altas y bajas, se ha agudizado en
las últimas décadas y la dictadura no logra enfrentarla de manera
positiva para satisfacer las necesidades mínimas de la población.

Altos dirigentes de la mal llamada "Revolución" han sido relevados de
sus cargos, durante los dos últimos decenios de inmovilismo. Pero todo
continúa más o menos igual.

Mientras el pueblo sufre profundas carencias, las principales figuras
del gobierno, calificadas por los cubanos como "intocables", gozan de
comodidades propias del Primer Mundo, las que se extienden a familiares
y amigos.

Los dirigentes de las empresas económicas estatales también disfrutan de
un singular confort.

Es increíble que las propias instituciones del estado comunista sean las
que abastecen el mercado negro. La pérdida de valores espirituales ha
incidido en que, quienes las administran, se roben los recursos y los
empleen en beneficio propio.

Cuando un órgano fiscalizador del estado realiza una ligera auditoría en
las empresas comercializadoras, detecta gigantescos desfalcos y
faltantes de productos. Muchos de estos últimos -que se venden a la
población-, no reúnen la calidad requerida.

Desde hace meses, el gobierno habla de importantes reformas que no
acaban de llegar. Las pequeñas transformaciones realizadas no se han
hecho sentir en la mesa y los armarios de la población.

Una sola opción percibe la gente para subsistir: robar y engañar. Nadie
en Cuba puede obtener lo que necesita, sin quebrantar las injustas leyes
impuestas por la acomodada nomenclatura comunista y hacer trampas al
prójimo, aunque en ello pongan en riesgo su libertad.

Para Cuba actualidad: primaveradigital2011@yahoo.com

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