Las tribulaciones de un cubano en Internet

Las tribulaciones de un cubano en Internet
Jueves, 23 de Mayo de 2013 10:58
Escrito por Jorge Luis González Suárez

Cuba Actualidad, Plaza, La Habana (PD) Cumplí 65 años y por primera vez
accedí a Internet el pasado 9 de mayo. Esta afirmación puede parecer un
infundio para cualquier persona en el exterior, pero es la pura realidad
para un cubano dentro de nuestras fronteras.

Estar por primera vez frente a una pantalla con ventanas, indicaciones,
textos y programas desconocidos, produce una incertidumbre difícil de
explicar y menos de comprender por individuos del mundo civilizado actual.

Saber qué hacer, dónde marcar, cómo buscar la información requerida,
conlleva casi un trauma para quien con mi edad se ve frente a tales
disyuntivas.

Mi vieja laptop, considerada por experimentados informáticos como una
"paleocomputadora", es ya todo un desafío que enfrento cuando trato de
hacer algunas cosas que, hasta un niño realiza con los ojos cerrados. La
experiencia que saco de este ejercicio es hallarme en la época
prehistórica junto al hombre de Neanderthal y los simios. Nada más me
faltaría subirme de nuevo al árbol y pedir platanitos.

Las terminologías que se aplican a esta ciencia -yo las defino como
ciencia ficción- según mis conocimientos, son indescifrables. Si
añadimos que la edad tampoco acompaña, la visión que tengo por delante
es monstruosa.

La pregunta que debe hacerse cualquiera ante estas confesiones es una
sola: ¿Por qué?

Aquellos que viven en cualquier régimen democrático les debe parecer
imposible que en el siglo XXI, alguien que exista en medio de la
modernidad no conozca estos adelantos. Aquí es algo cotidiano, pues el
gobierno prohíbe que los cubanos comunes puedan tener acceso a Internet,
que según su imaginativa interpretación, es muy peligrosa.

¿Qué es lo peligroso? No es secreto que el totalitarismo siempre trata
de evitar que las personas piensen y actúen en consonancia a su
intelecto. Dirigir su mente es la forma de realizar un control absoluto
sobre cada persona. Toda manera de información libre resulta
comprometedora. Si tenemos en consideración que Internet es un espacio
de comunicación y libertad de expresión múltiple en todos los sentidos,
se comprenderá el terror que inspira a los gobernantes cubanos.

La bloguera Yoani Sánchez, siempre ha abogado por la posibilidad de que
a todos los cubanos se les permita esta vía de indagación de los
sucesos, datos y demás formas de interpretación de la realidad
circundante. Este planteamiento no es exclusivo de ella, sino también de
todos los periodistas independientes y millares de cubanos más sin
ningún vínculo con la oposición.

Los aparentes cambios hasta ahora proclamados por el gobierno cubano
manifiestan la posibilidad de tal acción. Palabras expresadas por Díaz
Canel, primer vicepresidente del Consejo de Estado, han señalado
recientemente la imposibilidad de continuar esta censura contra la
Internet. Según su opinión, el asunto es permitir llegar a ésta y
enseñar a definir a la población qué informaciones son positivas o
negativas.

La escasa posibilidad que existe de llegar a Internet se halla de forma
casi exclusiva en los hoteles, siempre a precios prohibitivos para la
mayoría de los nacionales, o en centros estatales especializados y
controlados por las autoridades. Se necesita que estas barreras
desaparezcan para lograr un verdadero avance en tal sentido. El progreso
se impone a la fuerza.

Aspiro antes de terminar mis lúcidos días de vida poder sin cortapisas
saber qué ocurre, determinar qué es verdadero o falso y por sobre todas
las cosas, anhelo que cada cual tenga sus propias opciones y exprese sus
opiniones con la mayor libertad. El futuro impone este escenario.

Para Cuba Actualidad jorgelibrero2012@gmail.com

http://primaveradigital.org/primavera/cuba-sociedad/sociedad/7490-las-tribulaciones-de-un-cubano-en-internet.html