Revolucionarios conservadores
25 octubre, 2016 7:47 pm por Rogelio Fabio Hurtado
Marianao, La Habana, Rogelio Fabio Hurtado, (PD) El término
revolucionario ha gozado históricamente de prestigio en Cuba. Está muy
ligado a las luchas independentistas y en el pasado siglo XX identificó
siempre a los opositores a los gobiernos establecidos. Sin embargo,
después de 57 años de instalados en el gobierno, a los revolucionarios
realmente no les queda nada de tales.
La actual campaña desatada a nivel nacional contra el programa
estadounidense de becas de verano denominado World Learning lo evidencia.
En verdad, los conservadores del poder temen que alrededor de 60
estudiantes cubanos, no escogidos por ellos, puedan pasar apenas un mes
en los Estados Unidos, conviviendo libremente con familias
norteamericanas, conociendo de primera mano centros de estudios y
compartiendo con sus colegas norteños actividades docentes y culturales.
Para disuadir a los muchos interesados, han montado a todo lo largo y
ancho del país una campaña histérica, denunciando al programa como "otra
agresión del imperialismo".
Lo que realmente temen es que estos muchachos regresarían a Cuba
portadores de una visión real de los Estados Unidos, diferente a la que
ellos han difundido invariablemente del enemigo. Serían portadores de
una verdad a la que temen como Superman a la kriptonita.
Ante esta demonización, la entidad promotora podría reaccionar
desmintiéndola, para que los conservadores quedasen desenmascarados. Sin
embargo, me temo que la ignorarán, conformándose con invitar en lugar de
los cubanos, a jóvenes de muchos otros países, deseosos de disfrutarlas.
Lo peor sería que accediesen a que las autoridades cubanas se hagan
cargo de la selección, pues así todo el proceso iría a manos del DSE,
que enviaría a 60 o más pichones de héroes, agentes todos del
estancamiento perpetuo.
En lugar de preocuparse por los jóvenes cubanos que se lanzan al mar a
bordo de inseguras embarcaciones o emprenden la peligrosa ruta
centroamericana para llegar a los Estados Unidos, los conservadores
silencian eso, y se consagran a estériles demostraciones de fuerza, para
meterles miedo a los que pudieran aprovechar esta oportunidad. Lo que
pasa es que los balseros nunca retornan: mueren o se quedan allá.
Estos actos de repudio, llenos de gritos amenazadores y pataleos
histéricos, siempre han tenido el mismo objetivo: imponer a la fuerza
los caprichos de la microfracción gobernante, solo preocupados por
conservar su hegemonía como mandantes. El único fruto de estas
demostraciones ha sido siempre inyectar miedo a las personas, para que
aplaudan y obedezcan sin chistar.
Es muy humano que los conservadores se aferren al inmovilismo, que les
garantiza su modo de vida, como beneficiarios del usufructo perpetuo del
poder. Ya sabemos, por Marx, que "el hombre piensa como vive". Lo
inadmisible es que lo disfracen de patriotismo.
rhur46@yahoo.com; Rogelio Fabio Hurtado
Source: Revolucionarios conservadores | Primavera Digital -
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